Sobre el autor

Mi foto
Zaragoza, Aragón, Spain
Sindicalista de UGT Zaragoza entre 1977 a 2006. Periodo en el que fue uno de los refundadores de UGT Zaragoza, Sº de Acción Reivindicativa de UGT Zaragoza, Sº General de UGT en General Motors España, Presidente del Comité de Empresa de GM España, Sº General de UGT Metal Zaragoza, miembro del Comité Confederal de UGT y formó parte del Comité Europeo y Mundial de General Motors .

jueves, 29 de agosto de 2013

El sindicalismo que se odia

Tú haz lo que quieras, pero yo sigo. Y continuaré siempre, porque nunca renunciaré a mi ideología socialista, ni renegaré jamás de mi sindicato la Unión General de Trabajadores. La organización obrera con 125 años de historia, que ha visto de todo,  superando en todo momento los intentos de su liquidación.

UGT ha vivido periodos revolucionarios, la república, la guerra civil, la dictadura franquista, la clandestinidad y por fin la democracia y la libertad. Ha luchado, lucha y luchará, contra gobiernos y patronales por: La emancipación de los obreros, contra el hambre, la esclavitud en el trabajo, la precariedad, por el empleo, por mejoras salariales y sociales para los asalariados, por la justicia social en las empresas, por el Estado del bienestar. Siempre con un único fin, poder ser una herramienta de apoyo a la clase trabajadora y a las capas más desfavorecidas de la sociedad. Su trayectoria es impecable por sus objetivos, limpieza y claridad. Yo estoy profundamente orgulloso de ser ugetista y militante sindical. Si este sindicato desapareciera, los trabajadores lo volverían a reimplantar, como ya lo hicimos fortaleciéndolo en los pasados años setenta. Que el ultraliberalismo político y mediático lo tengan presente en sus oraciones antiobreras.

Los capitostes de la ultraderecha intolerante, no cesan en su empeño destructor del sindicalismo. En su interés anulador utilizan todo, hasta que los trabajadores puedan comer lo que les gusta. Esperanza Aguirre, esa aguerrida ultraderechista, acaba de hacer el ridículo más espantoso, al publicar una foto donde aparece un compañero del sindicato Comisiones Obreras cortando jamón. Como si los sindicalistas no tuvieran derecho a consumirlo. Los pobres saben criar el cerdo y comerse el jamón, pero ella sin los pobres que le crían el cerdo... comería esparto. Son tan ridículos e insignificantes que sus artimañas me producen tristeza, por su bajeza intelectual y mala intención.

¿Pero que derecha es ésta? ¿Cómo este país ha caído tan bajo? No se pueden aguantar estas estupideces y hay que reaccionar, más cuando ellos están destruyendo los derechos de los trabajadores, la educación, la sanidad, las pensiones, en suma el Estado del bienestar. Naturalmente, toda esta tropa liquidadora sabe muy bien que, el sindicalismo es la piedra que les duele en el zapato y el principal freno, a sus cruzadas patrióticas y privatizadoras de lo público. Por eso van a por él. Y seguirán yendo, con razón o sin ella. Su meta es eliminar la capacidad de respuesta de sus contrarios de clase, en detrimento de los intereses de la mayoría del pueblo español. 

¿UGT hace todo bien? Yo diría que casi todo y que si alguien suyo comete un error lo sabe depurar y enmendar pagando sus deudas. ¿Acaso no lo hizo con su cooperativa de viviendas PSV, al dedicar todo el capital recibido por su patrimonio histórico para no perjudicar a los cooperativistas? El fracaso de este proyecto, se fraguó en parte, por culpa del ataque financiero demoledor que recibió, al no permitirse por más tiempo, que el sindicato tuviera la cooperativa de vivienda sociales más grande de España.

Mas, como los músicos no paran de tocar, en agosto estamos contemplando dos campañas orquestadas. Una, de la CEOE, proponiendo eliminar los pocos derechos laborales que quedan, e intentado implantar lo que llama “hiperflexibilidad” contractual; o sea, contratos de capricho, baratos de coste, de superdominación de los empleados,  con jornadas inacabables y sin cobrar el tiempo de más. Otra, contra UGT, con el impulso del periódico El Mundo, como primer actor, sacando con cuentagotas para que tenga mayor impacto negativo, una serie de acusaciones sobre posibles facturas falsas de eventos del sindicato en Andalucía, giradas para su pago a la Administración andaluza.

Pues bien, con estas dos cuñas querían debilitar al sindicato de cara a las movilizaciones sindicales de otoño que, sin duda se harán, para impedir los sueños empresariales-gubernativos de liquidación total de la legislación laboral. Sin embargo, la estrategia de acoso y derribo les va a salir mal. Dado que, por un lado, UGT ya ha dicho que no va a negociar la pretendida “hiperflexibilidad”, “porque suena a una desregulación total”; y, como es previsible, los esperará en los centros de trabajo y en la calle. Y, por otro lado, el nuevo Secretario General de UGT Andalucía, Francisco Fernández Sevilla, bético e internacionalista según dice, acaba de declarar que “no es verdad que allí se utilicen facturas falsas”.

Se les acusa de girar 29.774,94 euros, por la publicidad de un curso en la contraportada de una revista sindical, cuando aseguran que facturaron muchísimo menos. Harán una revisión documental para si existe algún error del gasto corregirlo y reintegrarlo. Han informado que en los últimos cuatro años, el sindicato ha impartido 7.000 cursos de formación para 108.000 trabajadores. UGT Andalucía cuenta con 93 centros acreditados para impartir dichos cursos y cuenta además con un aula bus para llegar a todos los rincones de la comunidad. Asimismo, una media de 161 personas trabajan allí en orientación laboral. Fernández Sevilla ha declarado: “Somos los primeros interesados en que todo se clarifique y que todo se justifique correctamente, para que el buen nombre de UGT Andalucía siga manteniéndose y que la entidad sea útil para los trabajadores”. De todas formas, aunque no parece haber habido ningún lucro personal; la Comisión Ejecutiva Confederal de UGT, tiene que involucrarse también en este asunto, revelando algún delito si lo hubiera.    

Yo no conozco a ningún sindicalista rico. Si sé que  todos ellos y ellas pierden dinero por su actividad sindical y cuanto más tiempo la desempeñan mayor es la pérdida. Como ha sido en mi caso, la inmensa mayoría de ellos, únicamente cobran el salario profesional de la empresa que pertenecen y nada más, cuando son mayores los gastos que conlleva la actividad. Cabe incluso decir que, los salarios que reciben sus máximos responsables orgánicos, no son acordes ni mucho menos con la alta responsabilidad de los cargos que desempeñan. El sueldo del máximo líder de UGT, Cándido Méndez, es de 2.574 euros al mes, una vez deducidas las cotizaciones sociales.

Sobre los intoxicadores antisindicales, allá ellos con sus fobias y odios. Al sindicalismo de clase no lo vencerán jamás. Quitarán una piedra y les caerá la montaña encima. El historiador Ian Gibson, en 2007 dijo: “Sin una derecha razonable y dialogante, España nunca será el país que tantos anhelamos”. Vivimos tiempos de niebla y sin confianza en que brote la primavera. Que los sindicatos empiecen a regar los floreros.

29.08.2013                Fernando Bolea Rubio
                                   Sindicalista

lunes, 12 de agosto de 2013

En las llamas del infierno

Ser trabajador hoy en España es aterrador, como no ser nada. Una hoja que maneja el viento. Un mimbre que se dobla y no se alza. Nunca en democracia los asalariados han caído tan bajo, ni han estado tan mal. Ni el movimiento obrero ha permanecido tan dormido. Decir trabajador es decir esclavo, o sirviente mileurista de verano. El neoliberalismo no para, es como la peste que arrasa con todo. El estado laboral es inaguantable y, será todavía más, si no se apagan con acción sindical... las llamas de este infierno.

Quieren comprar a los trabajadores como si fueran un kilo de peras, baratos y de consumo inmediato, tirando después los corazones a la basura. La ministra del cataclismo, Fátima Báñez, cargando en si con 600.000 ocupados menos que antes de su  reforma estafa laboral; ha vuelto a coger la palanqueta, para hacer un nuevo atraco a los derechos de los trabajadores, al anular de hecho la facultad de los magistrados para declarar nulos, por defecto de forma, los Expedientes de Regulación de Empleo. El 50% de los ERE, son señalados como tales. Ella debe pensar, que con los jueces le ha salido un grano en el trasero. Y en parte es así. Sin embargo, se olvida de la principal causa de su mal, de las asesorias jurídicas de los sindicatos que, aún a su pesar, siguen vivas y muy activas. Posiblemente ahora, al cerrarles puertas jurídicas de defensa, hagan más uso de los juzgados, exigiendo responsabilidades empresariales penales. ¿Acabará con algún sujeto en la sombra? Su furúnculo, puede llegar a tener pus y traer cola. 

Pero la desfachatez de la ministra no acaba aquí. En el verano de la corrupción del Partido Popular por el Bárcenasgate. Con ficticias “cortinas de humo” gubernamentales –creando un serio conflicto diplomático con Gibraltar-, para desviar de la atención mediática la corruptela y la presión política sobre Mariano Rajoy. La torera Báñez, siempre al quite también, ha invitado a delatar a los que cobren el paro fraudulentamente, recurriendo al chivatazo ciudadano. Yo no sabía, que los presuntos  ladrones fueran gente tan honrada. La respuesta ha sido magnífica. Infinidad de personas se han dirigido a la web del ministerio, denunciando las andanzas de los PP-Gürtel-Barcenas, dejando a la autora de la chirigota en un escenario risible. Los fraudes no son tolerables. Sin embargo, esta señora no tiene autoridad política, ni moral, para pedir al pueblo algo así.

Eso sí, igual que los ríos, el ultraliberalismo -organizado en instituciones y centros de poder-, siempre vuelve a su cauce. Desde el principio de la crisis vienen diciendo que, como el euro no se puede (no se quiere) devaluar, los salarios de los trabajadores españoles se tenía que reducir un 20-30%, para que el país ganara competitividad. Deben pensar que en una empresa, el coste laboral es el único existente, cuando es posible bajar gastos en otras partidas significativas -logística, publicidad, compras-, sin coste social, ni diferencias sindicales.

Así, primero fue el Fondo Monetario Internacional (suelen decir lo que los gobiernos de cada país quieren oír) recomendando, el segundo día de agosto, “bajar los sueldos españoles hasta el 10%, en dos años, para crear empleo”. A continuación, cuatro días después, como una orquesta bien dirigida, el comisario europeo de Economía, Olli Rehn, apoyó el plan del FMI, “por el bien de los jóvenes parados españoles” dijo, con total desvergüenza.  Como si él no fuera uno de los principales culpables del desempleo español, por sus escandalosas políticas de austeridad y simpatías por los capitales alemanes. ¿Acaso, quiere eludir su responsabilidad en el desastre económico-social, que sufre España? Asimismo, Cándido Méndez (Secretario General de UGT), califica al FMI y al comisario de “ilustres ignorantes”, acusándoles “de sacudirse las moscas de cualquier responsabilidad, al atribuir a la inacción de los demás los graves  problemas que padece Europa”.

Según Méndez: “La correlación entre rebajas de salarios y recuperación del empleo no encaja con lo acontecido en nuestro país. Desde el año 2010, los salarios (en términos reales) han caído un 7,6%, y los empleos destruidos han sido 1.610.400”. Él recomienda, “aumentar el tamaño medio de las empresas españolas (como desde hace mucho se viene diciendo en este blog), para abordar el cambio organizativo y cultural que necesitan nuestras empresas para mejorar su capacidad financiera, tecnológica y exportadora”. En mi opinión, en los trabajadores no hay que ahorrar, sino invertir, para buscar su participación impulsora.¡Cuanta fuerza efectiva pierde inútilmente, la incultura empresarial y política!  

Existe además, el pacto salarial del II Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), para el periodo 2012-2014, firmado por los agentes sociales para proteger el empleo, con sustanciales reducciones de poder de compra. Con el mismo, en 2012, la infracción real fue del 2,9% y los salarios pactados del 0,5% para ese año. En consecuencia, un 2,4% menos que la inflación que, por cuatro años, resultaría un 10% de caída salarial. La misma, en dos años más, que la pretendida por el lobi FMI-Rehn. Por consiguiente, estos ilustres ignorantes: ¿Son solo unos metepatas, o sus mensajes tienen mayor alcance político?

Yo pienso, que han buscado dos efectos. Uno local, ayudando al Gobierno, a engrasar la tijera de los recortes al Estado del bienestar, que pronto materializará. Y otro alemán, en apoyo de Angela Merkel, en sus elecciones del 22 de septiembre. Haciendo ver a los alemanes que, no van a perder dinero, porque los problemas españoles se pueden solucionar por ellos mismos. Sin hacer, por ejemplo, “una devaluación del euro del 10%, en vez de reducir los salarios en ese porcentaje”, como el economista José Carlos Díez sugiere. Otro procedimiento sería, hacer una “quita” de la deuda general. Si fuera una maniobra así, sería intolerable que a España se le utilice en campañas propagandísticas, sin que el Gobierno español la defienda y valore.

No obstante, la verdadera serpiente de verano, con el veneno laboral más letal, la propone la CEOE, por pedir al Gobierno: “La posibilidad de imponer, en ciertos casos, contratos a tiempo parcial a trabajadores contratados a jornada completa”. “Ampliando el numero de horas complementarias que pueden realizarse del 15% al 30% de las horas ordinarias”. En concreto, menos compromiso contractual, con indemnizaciones inferiores de despido, llegado el caso. Pero, asegurándose la empresa para el día que le interese y sin pagar por ello, la disposición del asalariado durante la jornada completa, con el 30% de las horas extra. Lo que impediría al trabajador, adquirir compromisos para hacer otro trabajo parcial adicional en otra firma, para completar el sueldo diario, dado que un día podría ir a hacerlo y otro no. Todo esto, aunque los afectados no puedan consumir, ni vivir, o sufran sus familias situaciones extremas de necesidad. Para el economista, Antonio Baños: “Aquí lo único importante es el empresario, volviendo a las relaciones laborales de los años treinta”.

La derecha siempre ha llevado el país a la regresión y ahora está haciendo lo mismo. El socialista, Enrique Múgica, en 1992, dijo: “España era un país de tercera, lo hemos hecho de segunda, pero no podremos hacerlo de primera”. Que Lucifer apague el fuego.

         12.08.2013                                   Fernando Bolea Rubio
                                                            Sindicalista